Desde que he descubierto como se hace la mermelada casera no he vuelto a comprarla. En parte a quien tengo que darle las gracias es
a Marisa y su maravilloso blog, en el que tiene unas recetas muy buenas y sencillas, además de que es super simpática. Hacer la mermelada de esta forma es muy fácil, además no lleva conservantes artificiales, vamos! que es un placer poder disfrutarla en una tostada, un yogur o un trocito de queso fresco. Se conserva perfectamente durante un año. En mi caso le añado sólo un 50% de azúcar ya que no me gusta demasiado dulce . Os va a merecer la pena hacerla si os gusta lo casero y darle a vuestros postres un toque especial y único.
ingredientes:
- 1kg de fresas
- 500gr de azúcar
- el zumo de1/2 limón (para usar como conservante)
- una manzana pelada y descorazonada (se usa como espesante)
- unos tarros de cristal que sirvan para hacer el vacío
preparación:
Lavamos y limpiamos las fresas quitándoles el rabito y las cortamos en trozos.
Las vertemos en una olla amplia ya que luego al hervir salpica un poco, añadimos el zumo de limón y la manzana pelada y descorazonada.
Las dejamos a fuego suave unos 10min aprox, hasta que el jugo que sueltan las fresas halla reducido un poco y estén casi cocidas.
Mientras en una olla, esterilizamos los tarros y las tapas en abundante agua hirviendo durante unos 20min, e introducimos en el fondo un paño limpio para que los tarros no choquen entre si y no se rompan al hervir.
Añadimos el azúcar a las fresas y removemos a menudo con una cuchara de madera para que no se nos peguen al fondo. Dejaremos que se vaya haciendo a fuego suave sin la tapa, para que se evapore mejor.
Notaremos a medida que vaya reduciendo como espesa. Tardará más o menos unos 15-20min. Para saber como nos quedará de espesa, lo que podemos hacer es verter una cucharadita de mermelada en un plato pequeño he introducirlo en el congelador 2 minutos, al cabo de ese tiempo lo sacamos y la extendemos con el dedo, al estar ya fría veremos la textura que nos queda.
Retiramos los trozos de manzana. Y ahora tenemos dos opciones si queremos triturarla, una es con una batidora eléctrica y la otra pasarla por un pasapurés. Una vez hecho esto la introducimos de nuevo en la olla y la dejamos a fuego mínimo, de esta forma estará bien caliente para rellenar los tarros. A mi me gusta más pasarla por el pasapurés, ya que con la batidora le queda un poquito de espuma por encima que tendremos que retirar con cuidado con un cucharón. Pero si os gusta con algunos trocitos se deja tal cual.
Extraemos los tarros y las tapas de la olla con unas pinzas (yo uso las largas de hacer el churrasco) y los colocamos boca a bajo encima de un paño limpio de cocina 1min, luego le damos la vuelta para que no tenga condensación dentro y se sequen completamente, si las tapas aún están un poco mojadas las acabamos de secar con papel de cocina.
Rellenamos los tarros con un cucharón hasta casi los bordes (dejando aprox el espacio de un dedo hasta la tapa) procurando no manchar los bordes por fuera, si esto sucediera los limpiamos muy bien con un paño o papel de cocina, de esta forma las tapas cerrarán perfectamente y no correremos el riesgo de que se puedan crear hongos, los vamos tapando fuertemente y poniéndolos boca a bajo encima de un paño.
Los dejamos así durante unas 12 horas, luego le damos la vuelta y comprobamos que la tapa en el centro este perfectamente hundida, si no se aprecia a simple vista presionamos un poco con el dedo en el centro y si hace "click" o se hunde es que no ha hecho el vacío, en ese caso es mejor consumirla en los próximos días. Le colocamos una etiqueta con la fecha y ya se pueden guardar en la despensa.
Consejo:
Para que hagan el vacío correctamente se debe verter la mermelada bien caliente en los botes estirizados y luego enroscar las tapas fuertemente.
Y que cada uno elija con qué y con quien disfrutarla!!