Fueron todo un éxito!! La suave crema de frambuesas junto con la nata montada resulta una combinación irresistible (así que fui generosa con la nata ;) Si dobláis la cantidad de ingredientes podéis elaborar una maravillosa tarta con una base de galletas o bizcochos que le va a encantar a todo el mundo.
Por su sabor me recordaron a los Dalkys de fresa. Probadlos y ya me contaréis!
Ingredientes: para 3 vasitos
- 1 tarrina de frambuesas 125gr
- 2 cucharadas rasas de azúcar (para cocer con las frambuesas)
- 4 petit suisse de fresa (240gr)
- 50gr de queso de untar
- 40gr de azúcar
- 50ml de nata de montar 35% materia grasa
- 2 hojas de gelatina (4gr)
- 2 cucharadas de leche (para disolver la gelatina)
Reservamos 3 frambuesas para la decoración. En un cazo pequeño ponemos a calentar el resto de las frambuesas junto con las dos cucharadas rasas de azúcar, durante unos 5min aprox, hasta que espese un poco y obtenga la textura de una mermelada ligera. Luego la trituramos con una batidora de cuchillas y la colamos para retirarle las semillas. Dejamos que enfríe.
Mientras ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.
Mezclamos en un cuenco los petit suisse, el queso y los 40gr de azúcar, removemos bien hasta que la mezcla esté homogénea. Añadimos el puré de frambuesas, mezclamos.
Ponemos al fuego las dos cucharadas de leche, cuando esté caliente, escurrimos la gelatina y la disolvemos en ella. Se la añadimos poco a poco a la crema anterior.
Montamos los 50ml de nata. Se la agregamos con movimientos envolventes.
Vertemos la crema resultante en los vasitos.
Llevamos al frigorífico hasta que esté consistente unas 2-3 h aprox. Yo los dejé toda la noche.
Cuando los vayamos a servir, montamos la nata junto con los 20gramos de azúcar. La introducimos en una manga pastelera con boquilla rizada, decoramos con la frambuesa y las hojas de menta.
Y ya solo nos queda disfrutarlos...Umm!!