Hace par de semanas cuando vi publicadas las rosquillas de María José en su blog "
Un Cachiño Doce" de inmediato le "robé" la receta, tenían tan buena pinta que casi podía percibir su intenso aroma a anís a través de la pantalla ;) Ya le comenté que no podía entrar en su cocina sin haber merendado, porque luego me entraban unas ganas terribles de comer "larpeiradas" (dulces) jeje.
Haciendo caso a sus sabios consejos, hice la receta entera, ya que en principio tenia pensado usar sólo la mitad de los ingredientes, la razón es que somos pocos en casa y pensé que si sobraban al día siguiente ya no estarían tan buenas, pero he de decir que para mi gusto su sabor es todavía más intenso, estaban realmente deliciosas. Las hice un viernes y el sábado por la mañana desayunando y charlando en la cocina desaparecieron sin darnos cuenta :))
ingredientes: para unas 20-25 unidades (dependiendo del tamaño que las hagamos)
- 3 huevos
- 3 cucharadas de azúcar (tantas como huevos)
- 3 cucharadas de aceite de girasol (tantas como huevos)
- 380gr de harina (podéis necesitar una poco más dependiendo del tamaño de los huevos)
- 1 sobre de levadura tipo Royal
- 2 cucharaditas de postre de anís en grano (en el super suele estar junto a las especies)
- ralladura de un limón
- 50ml de anís
- una pizca de sal
- aceite de girasol para freírlas
ingredientes: para el almíbar
- 200gr de azúcar
- 1 sobre de azúcar avainillado (opcional)
- 100ml de agua
Elaboración de la masa:
Lo primero que hice fue machacar un poco en un mortero el anís en grano, lo suelo hacer siempre que lo empleo en alguna receta para que quede más menudo, pero podéis omitir este paso.
Ponemos en un vaso las tres cucharadas de aceite junto con los granos de anís y la ralladura de limón, lo dejamos macerar unas horas (yo lo hice por la noche y lo dejé hasta el otro día al mediodía)
En un bol batimos los huevos junto con el azúcar con unas varillas eléctricas hasta que queden espumosos.
Añadimos a los huevos el aceite con el anís en grano que hemos puesto a macerar junto con el azúcar, el anís líquido y la ralladura de limón. Mezclamos todo bien.
En un bol aparte mezclamos 350 gr de harina con la levadura. Los otros 30gr los reservamos para amasar luego. La vamos incorporando con una cuchara de madera a la mezcla de los huevos, hasta que nos quede una masa un poco compacta.
Cogemos los 30gr de harina restantes y esparcimos una poca encima de una superficie plana y continuamos amasando
incorporamos la harina poco a poco hasta que nos quede una masa elástica y un poco pegajosa, que no se pegue demasiado a las manos pero sí un poco, la razón es que si tiene demasiada harina la masa, nos saldrán muy duras.
Introducimos de nuevo la masa en el bol, lo cubrimos con un paño y dejamos reposar la masa como mínimo una hora (yo la dejé dos horas)
Pasado el tiempo de reposo, untamos las manos ligeramente con unas gotas de aceite, cogemos pequeñas porciones de masa y formamos bolitas del tamaño de una nuez más o menos, luego introducimos el dedo en el centro para hacer el agujero.
Ponemos a calentar abundante aceite en una sartén y las freímos un par de minutos por cada lado hasta que estén doradas.
Las vamos depositando en una fuente cubierta con papel absorbente.Una vez las tengamos todas fritas procedemos a hacer el almibar.
Preparación del almíbar:
Ponemos en un cazo el azúcar y el agua y lo llevamos a ebullición. Cuando hierva, bajamos el calor y lo dejamos a media temperatura durante unos 10min. La mejor prueba para saber que está listo es dejar caer el líquido y que caiga de forma continua, haciendo hilo. Cuando sea así, bajamos el calor de la cocina al mínimo y bañamos las rosquillas por ambos lados. El almíbar es bastante pegajoso, lo mejor es depositaras encima de una rejilla o en una fuente cubierta con papel de hornear de forma que no se toquen entre ellas.
Y las dejamos secar, luego las podemos guardar en una lata o en un bote hermético por un par de días.
Os deseo unas felices mini vacaciones de Semana Santa, Besos!!!