tarta fresca de café y nata (tipo capuchino)

El contraste de sabores de esta tarta es realmente cautivador!! su textura tan suave y cremosa es una verdadera delicia para cualquier paladar. Mis catadores dan buena fé de ello ;)

Puse la foto la semana pasada en la portada del facebook y al verla, más de uno se quedó con las ganas de hincarle el diente jeje, prometí que la pondría esta semana así que aquí la tenéis.
Su realización es bastante sencilla, pensé que igual me había quedado un poco corta con la gelatina ya que no tenía más, pero quedó estupenda. Os aconsejo que la hagáis de un día para otro porque así se asientan los sabores y está mucho mejor.
Os aseguro que en cuanto la probéis vais a quedar con ganas de reptir.

Ingredientes: para un molde de 22cm
Para la base:

• 130gr de galletas hojaldradas (yo las compré de la marca, "opey" en el Lidl)
• 75gr de mantequilla ligera
• 1 cucharadita de postre de café soluble

Para la crema de café:

• 200gr de queso de untar (tipo philadelphia)
• 200ml de nata 35% materia grasa
• 170gr de azúcar
• 2 cucharadas rasas de café soluble (si os gusta el sabor intenso ponerlas colmadas)
• 2 cucharadas de licor crema, o licor café (como más os guste)
• 3 hojas de gelatina (unos 6gr)
• 3 cucharadas de leche para disolver la gelatina

Para la crema de nata:

• 200gr de queso de untar
• 200ml de nata 35% materia grasa
• 90gr de azúcar
• 3 hojas de gelatina (unos 6gr)
• 5 cucharadas de leche para disolver la gelatina

Para la decoración: cacao puro para espolvorear por encima

Lo primero será introducir en el congelador el recipiente donde batiremos la nata para que esté bien frío.
Abrimos el molde y colocamos el aro (sin la base) en el plato donde vayamos a presentar la tarta.

Para la base:
Trituramos las galletas o bien con un robot de cocina o introduciendolas dentro de una bolsa de plástico a la que le pasaremos el rodillo por encima. Las vertemos en un bol y le añadimos la cucharadita de café, mezclamos un poco. Derretimos la mantequilla y se la agragemos a las galletas, removemos y a continuación colocamos la mezcla dentro del molde formando la base, presionamos un poco con el dorso de la cuchara para que nos quede compacta.

Preparamos la crema de café:
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría durante 10min aprox, mientras preparamos los demás ingredientes.

Montamos la nata con unas varilla eléctricas en el recipiente que previamente pusimos a enfriar. Una vez montada reservamos en la nevera.

En un bol mezclamos con las varillas eléctricas, el queso, el azúcar, y las dos cucharadas de café soluble hasta que nos quede una crema suave y el café esté completamente disuelto. Agregamos el licor.

Ponemos a calentar en un cazo las tres cucharadas de leche. Cuando esté caliente le incorporamos las hojas de gelatina escurridas, mezclamos bien, dejamos que se temple un poco y la agregamos poco a poco, removiendo a la crema de café.

Incorporamos la nata montada con unas varillas manuales y con movimientos envolventes.

Vertemos la mezcla dentro del molde y lo dejamos reposar en la nevera aprox 1 hora y media para que cuaje un poco antes de añadir la siguiente capa.

Cuando veamos que ya ha cuajado procederemos con la crema de nata.

El procedimiento viene siendo prácticamente el mismo que empleamos para elaborar la crema de café.

Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría durante 10min. Montamos la nata en el recipiente que previamente pusimos a enfriar. Una vez montada reservamos en la nevera.

Mezclamos con las varillas eléctricas el queso con el azúcar, hasta que nos quede una crema suave. Ponemos a calentar las tres cucharadas de leche. Cuando esté caliente le incorporamos las hojas de gelatina escurridas, dejamos que se temple un poco y la agregamos a la mezcla de queso.
Incorporamos la nata montada con unas varillas manuales y con movimientos envolventes.
 

Una vez preparada la crema de nata. Retiramos el molde de la nevera, y con la ayuda de una cuchara la vamos vertiendo poco a poco encima de la de crema de café. Introducimos de nuevo el molde en la nevera durante unas 3-4 horas para que coja consistencia. Mejor aún si la dejamos de un día para otro.

Para desmoldarla, primero pasamos un cuchillo por el borde interior del aro y lo retiramos. Luego la espolvoreamos con el cacao por encima.

Para la decoración  emplee dos círculos que hice con  papel de hornear, uno pequeño para el centro y uno más grande para el borde. Podéis usar el diseño que más os guste. Una vez esparcido el cacao retiramos el papel con cuidado.

 Una tarta con la que váis a triunfar!

cupcakes de salmón ahumado, queso parmesano y crema de queso

Es la primera vez que hago unos cupcakes salados y estoy segura que no va a ser la última.
La receta la encontré navegando por youtube. Cuando me pongo a ojear vídeos de cocina me pierdo :) da igual en el idioma que estén, chino o ruso, y no es que sea una experta en idiomas (que más quisiera) pero como una imagen vale más que mil palabras, observo los ingredientes y cojo ideas para luego poner en práctica como en estos cupcakes.
Su elaboración es muy fácil,  la combinación del salmón y el queso parmesano hacen que resulte un bocado esponjoso, húmedo y muy apetecible. Os lo recomiendo!!

ingredientes: para unos 14 cupcakes dependiendo del tamaño que los hagamos.

• 2 huevos
• 100gr de harina
• 10gr de levadura tipo Royal
• 70gr de aceite
• 80gr de leche
• 70gr de parmesano
• 120gr de salmón ahumado cortado en trocitos

para la decoración:

• 2 cucharadas de nata de montar
• 200gr de queso de untar
• unos trocitos de salmón ahumado

Yo los hice de dos tamaños, unos más grandes y otros más pequeños, para mi gusto los pequeños son perfectos.

Preparación:

Vertemos los huevos en un bol y los batimos con un tenedor.

A continuación añadimos la harina mezclada con la levadura, mezclamos bien con unas varillas manuales,  a continuación incorporamos la leche poco a poco en varias etapas.

Vertemos el aceite poco a poco de la misma forma que hicimos con la leche, continuamos mezclando hasta que nos quede una masa homogénea.

Añadimos el parmesano y mezclamos bien.

A continuación incorporamos el salmón y removemos hasta que esté todo integrado.

Introducimos unas cápsulas de papel para magdalenas dentro de unos moldes rígidos (podéis usar unas flaneras o moldes para magdalenas). Vertemos la masa dentro de las cápsulas hasta la mitad.

Los introducimos en el horno precalentado a 180º durante unos 15-20 min,  pinchamos con un palillo para saber si ya están listos, si sale limpio es que ya están, si no los mantenemos en el horno un par de minutos más.

Los dejamos enfriar antes de decorarlos.

Preparación de la crema para la decoración:

Ponemos en un bol las dos cucharadas de nata y los 200gr de queso de untar. Batimos todo con unas varillas eléctricas hasta que esté bien mezclado y con un poco de consistencia.
Llenamos una manga pastelera con la preparación y le colocamos una boquilla rizada y a continuación los decoramos al gusto de cada uno.

Así es como se aprecia el interior. Fijaros que esponjositos.

Ya veis que son bastante fáciles ¿no? ;)

tarta de manzanas y moras, os cautivará !!

Todos los años voy a recoger moras para preparar mermelada o emplearlas en algún  tipo de dulce como en esta ocasión. Esta no es una de esas tartas que cuando la ves se queda uno prendado de ella, pero en cuanto la pruebas te enamoraaaa!!

Mientras dejé reposando en la nevera la masa quebrada, nos fuimos mi maridín y yo a recoger las manzanas a la huerta y las moras a una zarza que está a pocos metros de casa,  todo un lujo y además gratis  :)
Me inspiré en una receta de Jaime Oliver,  yo le hice algunas modificaciones.
Tengo que confesaros que aunque me resultaba muy tentadora, dudé un poco antes de hacerla, porque  no estaba muy convencida de que combinaran bien las manzanas con las moras, y he de deciros que quedó de fábula. Es ligeramente crujiente por fuera y jugosa por dentro, con un puntito ácido que la hace adictiva.
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Ingredientes: para un molde de 28cm  (yo usé uno con la base movible)
Ingredientes para la masa quebrada:

• 325gr de harina de repostería (y una poca más para ayudar a estirar la masa)
• 125gr de mantequilla blanda (no derretida)
• 2 huevos medianos
• 80gr de azúcar normal
• 2 sobres de azúcar avainillado (unos 16gr)
• 1 cucharada de leche entera
• 1 cucharadita de café de levadura, tipo Royal
• una pizca de sal

Para el relleno:

• 700gr de manzanas (una vez peladas) yo usé dos variedades, tabardilla y Akane
• 160gr de moras
• 100gr de azúcar moreno
• 2 magdalenas desmigadas o un trocito de bizcocho (las moras desprenden mucho jugo y al incorporar las dos magdalenas lo absorben y la masa quebrada no se ablanda)
• Huevo batido con una pizca de leche para pincelarla por encima.

Preparación: de la masa quebrada.
En un bol vertemos todos los ingredientes, la harina, la mantequilla en trocitos, el azúcar normal y el avainillado, la leche, la levadura y la sal. Mezclamos con las manos (bien limpitas) hasta formar una bola. No necesita que la trabajemos mucho. Envolvemos en film transparente y la dejamos reposar en la nevera aprox una hora para que coja consistencia. Si tenemos prisa la podemos introducir en el congelador durante unos 10 min.

Untamos el molde ligeramente con mantequilla, reservamos.
Mientras reposa la masa, pelamos las manzanas y luego las cortamos en trozos un poquito gruesos. Agregamos las moras, el azúcar moreno y dejamos macerar mientras estiramos la masa.

Dividimos la masa en dos partes. (reservamos una parte en la nevera para que no se ablande). Cogemos un trozo de papel de hornear y esparcimos un poquito de harina. Depositamos el trozo de masa encima y la aplanamos un poco con las manos dándole forma redondeada. Esparcimos un poco de harina sobre la masa, colocamos otro trozo de papel encima y la vamos estirando poco a poco con el rodillo, retiramos de vez en cuando el papel superior para poder espolvorear la masa con un poquito de harina.

De esta forma va a quedar lisita y es más difícil que se quiebre la masa. Si esto sucediese se une con los dedos y luego se le pasa de nuevo el rodillo por encima, os quedará perfecta. El tamaño del círculo tiene que ser un poco más grande que el molde. Retiramos el papel superior y la enrollamos con el papel inferior.

Colocamos el rollo sobre el molde y lo desenrollamos sobre este,  la ajustamos con las manos dejando que los bordes sobresalgan un poco, pincelamos todo el borde con la mezcla de huevo y leche batido para que luego se pegue a la parte superior. Reservamos el resto de huevo para pincelar por encima. Mezclamos las magdalenas desmigadas con las manzanas y las moras y rellenamos el molde.

Estiramos el siguiente trozo de masa, siguiendo el mismo procedimiento que hicimos anteriormente, presionamos con los dedos los bordes para que se sellen y recortamos lo sobrante. Hacemos unos pequeños cortes con un cuchillo para que salga el vapor y pincelamos por encima con la mezcla de huevo. Espolvoreamos un poco de azúcar blanco.

Introducimos en el horno en la segunda ranura comenzando por abajo a 180º sin aire durante unos 45-50min dependiendo de cada horno (los últimos 10min con aire).

Retiramos del horno, esperamos a que se enfríe y luego desmoldamos.

Que rica!! Me recuerda a las típicas tartas que aparecen en las pelís del oeste. Os ena-mora-rá!!

bizcocho esponjoso, con nueces y glaseado de chocolateee!!

Uno de mis mayores placeres es levantarme un domingo por la mañana y poder disfrutar con la familia de unas magdalenas o un trocito de bizcocho recién hecho. Este bizcocho junto con el de almendra con naranja es uno de nuestros favoritos.
Tanto su esponjosidad como su sabor os van a encantar! La glasa de chocolate es toda una delicia, al secarse queda consistente pero blandita.
Tenía pensado sacarle otra foto una vez que se secara pero cuando me acordé ya había desaparecido :)  Si no os apetece ponerle el glaseado, en su lugar podéis espolvorearlo con azúcar glas. Os dejo la receta para que podáis disfrutarlo.

ingredientes: para un molde de 26cm.

• 7 huevos medianos
• 2 sobres de azúcar avainillado (unos 16gr)
• 290gr de azúcar
• 120ml de aceite de girasol
• 2 cucharadas de licor de avellanas
• 4 cucharadas de leche entera
• 200gr de harina de repostería
• 10gr de levadura química
• 100gr de nueces (sin cáscara)
•  una pizca de sal

Para la glasa de chocolate:

• 100ml de nata 18% materia grasa (la de cocinar)
• 1 cucharada de azúcar
• 40gr de chocolate de cobertura

Preparación:

Cascamos las nueces y las trituramos con la picadora, o las introducimos dentro de una  pequeña bolsa de plástico y le pasamos el rodillo de cocina por encima, reservamos.

Encendemos el horno a 170º (sin aire) para que se vaya calentando.
Untamos con una pizca de aceite el molde que vayamos a usar, reservamos.

En un bol grande vertemos los huevos, el azúcar normal y el avainillado.

Batimos todo con unas varillas eléctricas, durante unos 7-8 min a máxima velocidad hasta que casi doblen el volumen y adquieran un color más clarito y esponjoso. Este paso es muy importante para que el bizcocho nos quede bien esponjoso.

A continuación  incorporamos poco a poco el aceite en forma de hilo y continuamos batiendo un par de minutos más a velocidad moderada para no salpicarnos.

Añadimos la leche, el licor y mezclamos

Mezclamos la harina con la levadura y una pizca de sal. La tamizamos con un colador y ayudándonos de unas varillas manuales la incorporamos poco a poco a la mezcla anterior (en tres o cuatro veces) con movimientos envolventes.

Por último añadimos las nueces molidas con movimientos envolventes hasta que estén bien incorporadas

Vertemos la mezcla dentro del molde que previamente untamos con aceite.

Introducimos el molde en el horno (que tenemos precalentado) en la segunda ranura comenzando por abajo durante unos 45-50min aprox dependiendo de cada horno, hasta que tenga un colorcito dorado por encima. Para comprobar si esta listo introducimos un palillo y si sale limpio es que ya lo está, en caso contrario lo dejamos un par de minutos más. Al retirarlo del horno bajará un poquito así que no os preocupéis porque es normal.

Lo dejamos enfriar antes de desmoldarlo. Una vez retirado del molde preparamos la cobertura de chocolate o simplemente  lo espolvoreamos con azúcar glas.

Este lo hice hace dos semanas y lo espolvoreé con  el azúcar glas.

Glaseado de chocolate:
Ponemos a calentar en un cazo la nata y el azúcar, cuando comience a hervir bajamos el fuego al mínimo e incorporamos el chocolate en pequeño trozos, removemos bien hasta que se disuelva del todo. Hervimos durante un par de minutos más hasta espese un poco.

Dejamos enfriar hasta que este tíbio y luego lo esparcimos por encima del bizcocho.

Esperamos una media para que coja un poquito de consistencia.

Lo horneé por la noche y por la mañana en la cocina todavía se apreciaba su delicioso aroma. Ummm!!

Pincho de tortilla francesa con, cebolla, calabacín, queso y pimientos de padrón

En mi pueblo cada quince días hay feria los domingos por la mañana. Para mí visitar los diversos puestos es una cita "obligada". Ese día nos sentamos a la mesa más tarde que de costumbre y mientras se termina de hacer la comida suelo preparar algo para ir picando.
Estos pinchos como veis son muy sencillos. Los suelo elaborar muy a menudo, bien para cenar o como entrantes.
Si por ejemplo tengo unas lonchas de jamón cocido o beicon se las incorporo también, quedan exquisitos y muy jugosos.... ¿que? ya tenéis pensado lo que vais a preparar para cenar? ^_^  ¿no! pues poneros el delantal que en par de minutos los tenéis listos.

Ingredientes: para 6 unidades

• 1 cebolla mediana
• 1/2 calabacín pequeño
• 4 huevos grandes
• 2 tranchetes de queso, o dos lonchas de uno que sea cremoso
• 6 rebanadas de pan de chapata
• 6 pimientos de padrón
• aceite de oliva
•  sal

Preparación:

Cortamos la cebolla en trocitos pequeños.
Lavamos y rallamos el calabacín (sin pelar) con un rallador, o usamos un cuchillo y lo cortamos en trocitos pequeños.

Vertemos un chorrito de aceite en una sartén y cuando esté caliente pochamos el calabacín y la cebolla hasta que estén semitransparentes. Añadimos una pizca de sal.

Mientras se pochan, aprovecharemos para batir los huevos en un cuenco, y freír los pimientos en una sartén pequeña aparte, reservamos
Cuando la cebolla y el calabacin estén listos, los retiramos de la sartén con una espumadera y los incorporamos a los huevos batidos, mezclamos y añadimos un poquito de sal.

En el aceite que nos sobró de freír la cebolla aprovechamos para hacer la tortilla. Dejamos una fina capa de aceite en el fondo de la sartén, y retiramos el resto si fuera necesario.
Cuando el aceite esté caliente echamos la mezcla de huevos en la sartén y la ladeamos un poco para que la mezcla se esparza bien.

Bajamos el fuego para que se vaya cocinando despacito y no nos quede cruda por dentro, cuando esté media cuajada, incorporamos en el centro las dos lonchas de queso.

La vamos enrollando poco a poco con la ayuda de la espumadera hasta que esté cuajada del todo.

Retiramos para un plato y la dividimos en seis partes.
Depositamos un trozo de tortilla encima de cada rebanada de pan y a continuación un pimiento de padrón encima.

Y solo queda darnos prisa antes de que se enfríen!!!